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Te pasas los días preguntándote “¿acaso necesito un seguro de vida?”, sigue leyendo para saber si es necesario obtener uno.

 

En la actualidad, México ha estado atravesando por una crisis de inseguridad bastante marcada, es por eso mismo que las instituciones que ofrecen servicios de seguros han ido creciendo considerablemente.

Dentro del país, el índice de homicidios ha aumentado por lo menos en 25 Estados de la República Mexicana; y en algunas entidades los asesinatos se dispararon hasta en un 500%. Esto quiere decir que el año 2017 ha sido uno de los más graves en cuanto a delincuencia se trata.

 

México y los seguros de vida

Tristemente nuestro país no tiene mucha educación en cuanto a los seguros de vida; día con día podemos escuchar o ver en las noticias o periódicos que ocurren muertes en cualquier parte del país. Por lo que mucha gente ha comenzado a preguntarse “¿acaso necesito un seguro de vida?”.

Sabemos que no es muy agradable pensar en la muerte, pues a pesar de ser un proceso natural es un tema que muy pocas personas gustan de hablar. Sin embargo es necesario tener en cuenta que un seguro de vida es una buena forma de invertir tu dinero y de prevenir las situaciones financieras.

Es necesario que te preguntes “¿acaso necesito un seguro de vida?” pues muchas veces no se toma la importancia a esto, principalmente cuando se es joven y soltero. Y aunque no necesariamente lo requieras en esos momentos seguro te pondrás a pensar en su existencia cuando comiences a planear un futuro con familia.

Aún así, si eres soltero tienes la posibilidad de asegurar a tus padres; actualmente existen muchas opciones que te ofrecen servicios para asegurarte y deberás de elegir la mejor opción para ti.

Si ya cuentas con una familia, es preciso que ya tengas contratado algún tipo de seguro de vida. Principalmente porque los niños estarán bajo tu cuidado y manutención, es decir, de ti depende su comida, la vestimenta, medicina y todo lo demás.

Así que ponte a pensar, si por cualquier terrible situación te pasa algo ¿qué será de ellos? Los seguros de vida pueden pagar por un gran lapso de tiempo estas situaciones que son indispensables para poder sobrevivir.

Ahora, si ya estás casado, un seguro de vida es algo que necesitas a la de sí o sí. No necesitas tener hijos, éste consiste en crear una carrera y una vida junto con tu pareja, de pagar las cuentas y de solventar los gastos del día a día.

Sin embargo también es necesario pensar en nuestra pareja y contratar un seguro de vida es algo que debes de tener en cuenta incluso antes de llegar al matrimonio.

Preguntarse “¿acaso necesito un seguro de vida?” no es un acto de lujo, sino de supervivencia. Principalmente por las situaciones sociales de las que México está sufriendo día a día y por la seguridad de mantener el orden social y principalmente personal de una manera mucho más fácil.

Con esto no queremos decir que todo se solucione por medio del seguro de vida pero sí es necesario tener en cuenta que muchas veces es la solución a los problemas adquiridos por este tipo de sucesos que afectan a la sociedad.

Veamos entonces las ventajas de obtener un seguro de vida y cómo es que lo puedes lograr pues hay que tener en cuenta que hoy en día existen muchas alternativas para adquirir uno o más. Sigue leyendo para conocer la información.

 

Seguro de vida.

 

¿Cuánto cuesta el seguro social?

Como bien sabemos, el seguro social puede ser una alternativa de seguro de vida y éste es proporcionado por el Instituto Mexicano del Seguro Social; quien tiene la función de proporcionar a la comunidad y a los derechohabientes los servicios médicos necesarios.

El seguro facultativo voluntario del IMSS se puede incorporar al Régimen Obligatorio mediante un convenio entre el asegurado y el propio Instituto, es decir, mediante una empresa y el IMSS para todas aquellas personas que sean profesionales independientes, pequeños comerciantes, artesanos, trabajadores no asalariados, pequeños propietarios, trabajadores domésticos, ejidatarios y colonos, entre otros.

En cuanto al Régimen Voluntario es necesario saber que es aquel que comprende el Seguro de Salud para la Familia (SSF). El cual dictamina, según el artículo 242 de la Ley del Seguro Social, se pagarán anualmente las cuotas de pago referentes al grupo familiar por cada sujeto y familiar adicional que se contrate.

 

¿Cómo puedo pagar mi seguro por cuenta propia?

A continuación los precios dependiendo de la edad:

Nota: Todas estas cuotas están valoradas en moneda nacional (MXN).

La forma de pago es de manera anual anticipada y podrás contratar el servicio en el Departamento de Afiliación en la Subdelegación Administrativa.

Es importante que tengas en cuenta que este tipo de servicios tienen sus condicionantes que se encuentran dentro del Reglamento de la Ley del Seguro Social en Materia de Afiliación, las cuales señalan los tiempos de espera para adquirir el seguro voluntario.

Éstos son: seis meses de espera después de haber sido diagnosticado algún tipo de tumoración benigna de mama, diez meses después de un parto, un año después de cirugía de índoles ginecológicos (a excepción de neoplasias malignas de útero, ovarios y piso perineal), además de las cirugías de hernias y de insuficiencia venosa y várices y finalmente dos años para cirugía ortopédica.

Así que si te sigues preguntando “¿acaso necesito un seguro de vida?” podrás responderte que por lo menos un seguro social tiene un rango de precio bastante accesible y los trámites no son muchos si es que lo quieres tramitar.

Para poder tramitar este seguro es necesario que se acuda directamente a la Subdelegación Metropolitana; en este lugar se deberá de llenar y firmar un formato individual, un cuestionario médico proporcionado por el IMSS además de las personas del núcleo familiar que deseen adquirir este seguro deberán de someterse a los estudios y exámenes que este instituto requiere para constatar sobre su estado de salud.

Con este seguro adquieres el derecho de las prestaciones en especie del Seguro de Enfermedades y Maternidad únicamente en atención médica, hospitalaria y medicamentos. Lo cual significa un gran apoyo para la economía personal y para una buena salud.

Lo que no adquiere es: cirugías estéticas, lentes de contacto, intraoculares y aparatos auditivos, así como la adquisición de anteojos, cirugías para la corrección de astigmatismo, presbicia, miopía e hipertropía.

Tratamiento de lesiones derivadas de la práctica de deportes de alto riesgo, tratamientos de trastorno de conducta y aprendizaje así como los tratamientos dentales (excepto de limpieza, extracciones y obturaciones. Los tratamientos de padecimientos crónicos tampoco entran en este seguro, ni aquellos que requieran de un control terapéutico permanente.

Aquellos servicios que requieran de tratamientos quirúrgicos o médicos de fertilidad y de secuelas de lesiones adquiridas con anterioridad tampoco entran. Ni mucho menos los tratamientos de secuelas de enfermedades degenerativas adquiridas con anterioridad al aseguramiento.

Así que toma tus precauciones y determina si este es el tipo de seguro que se adapta mejor a tus necesidad. Es bueno saber que de igual forma hoy en día existen muchas otras alternativas que ofrecen servicios muchos más extensos que pueden llenar las expectativas de mucha gente.

Conoce el procedimiento para saber cómo tramitarlo en la página del IMSS.

¿ Acaso Necesito un Seguro de Vida ? - Prendamovil

Lo que debes de saber antes de contratar un seguro de vida.

Si la pregunta “¿acaso necesito un seguro de vida?” sigue atormentando tus pensamientos, nosotros te podemos recomendar que lo mejor es contratar un seguro de vida desde temprana edad.

Pues es bueno saber que la esperanza de vida ha ido aumentando con el paso de los años y aunque la longevidad ha crecido a comparación de años anteriores gracias a las nuevas tecnologías, también es verdad que los riesgos de mortalidad siguen estando latentes.

Es por eso que la importancia de contar con un seguro de vida es abismal, principalmente porque éste te ayuda a proteger económicamente a tu familia o beneficiarios en caso de que ocurra algún evento desfavorable.

Si estás pensando en contratar un seguro de vida; es indispensable que tengas en cuenta los siguientes puntos.

 

1.- La suma asegurada

Esto se refiere a la cantidad monetaria que recibirá tu familia o beneficiarios a la hora de llegar a faltar. Es importante que cuando establezcas el monto tomes en cuenta el número de personas que dependen de ti y sus edades.

Haz un cálculo general de la cantidad de dinero que ascienden los gastos de tu casa mensualmente. También ten en cuenta si alguien de tus beneficiarios está estudiando o piensa hacerlo y cuáles son los gastos de la educación.

Finalmente y lo más importante, cuánto es el monto total de tu sueldo. Con todos estos puntos tendrás un panorama general de los gastos reales de los beneficiarios y así podrás asegurarte acorde a la capacidad de pago con la que cuentas.

 

2.- La prima

La prima es el precio de tu seguro. Debes de tener en cuenta que no siempre el que cuesta más es el que resulta mejor así que tómate el tiempo de verificar las condiciones y los beneficios adicionales que ofrece cada institución.

El costo de la prima depende de la suma que será asegurada, la edad, el género, las actividades que se realicen, el estado actual de la salud y otro tipo de coberturas adicionales que deben de ser mencionadas antes y durante la contratación. Entre más claro te quede todo desde un principio, mucho mejor.

 

3.- Las coberturas

Es bueno que te informes de forma detallada qué tipo de cobertura es la que estás buscando, pues el precio del seguro variará dependiendo de éstas. Lo que generalmente cubren es el fallecimiento y también puedes encontrar otras como la invalidez, pérdidas orgánicas, gastos funerarios, enfermedades terminales, entre otras.

 

4.- Los beneficiarios

Si en este punto sigues preguntándote “¿acaso necesito un seguro de vida?”; entonces es momento de que pienses en aquellas personas que serán las beneficiadas por tu seguro de vida.

Designa entonces de manera correcta a las personas que querrás que obtengan el beneficio monetario. Además aquí deberás de poner el nombre completo de forma clara y precisa de la o las personas especificando la cantidad (porcentaje) de la suma que le corresponderá a cada uno. Verifica que el total de un 100%.

Se recomienda no elegir a beneficiarios que sean menores de edad así como no designar a personas que cobren la suma asegurada y se la entreguen a otra persona, pues su obligación será únicamente de índole moral.

 

5.- Compara

Existe un mito que dice que los seguros de vida son caros, sin embargo existen hoy en día numerosas alternativas dentro del mercado. Lo ideal es que te tomes el tiempo para verificar qué es lo que quieres obtener y a qué precio.

Finalmente debes de saber que generalmente existen cinco tipos de seguro:

Revisa la herramienta RESBA (Registro de tarifas de Seguros Básicos); elaborado por la CONDUSEF, que te ayuda a conocer más acerca de estos servicios.

 

Conclusión

Tener un seguro de vida es una forma de asegurar tanto nuestro futuro como el de las personas que nos rodean, así que deja de preguntarte “¿acaso necesito un seguro de vida?”; y toma la decisión de la contratación de alguno que te ayude a administrar tu futuro.

Recuerda que contar con uno puede asegurar la estabilidad económica de aquellas personas que te rodean, no importa si eres soltero, casado o divorciado, siempre hay una opción para cada una de las necesidades de las personas.

Recuerda que si quieres obtener algún tipo de financiamiento necesitas un poco de inversión, por lo que te invitamos a que te comuniques con nosotros para poder obtener el beneficio y así contratar un seguro de vida; que resulta bastante indispensable hoy en día.

 

 

 

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